Un mundo feliz de Huxley. Prolegómeno para un análisis filosófico.

2
Homogeneizados, no como gotas de agua, pues el agua es capaz de horadar a la larga el más duro granito; sino como gotas de lacre derretido que se adhieren, se incrustan, se incorporan al objeto sobre el que caen, hasta que por fin la roca queda convertida en un bloque escarlata. En ese bloque cada individuo cree juzgar, cree desear y cree decidir por su cuenta; cuando en realidad, todo aquello que juzga, cree y desea le ha sido impuesto o, en el mejor de los casos, sugerido.

Considero que existen múltiples y variadas sinopsis de la principal obra de Huxley, por lo que con el presente escrito no haremos referencia a la historia como tal sino que realizaremos un somero análisis filosófico de algunos lugares comunes en esa distopía y la realidad en la que nos desenvolvemos comúnmente.


A manera de lista ejemplificativa, más no taxativa, podemos encontrar los siguientes tópicos:

1. La primacía de una sociedad estable y la eliminación del pensamiento individual, con lo que se favorece una posición Hegeliana extremista donde:

a) Se privilegia, la comunidad, la identidad y la estabilidad;

b) Existe una clasificación de los individuos en castas;

c) Existencia de un enjambre de identidad indistinguible donde no existen lazos de unidad con otros individuos en lo particular sino una unión con el ente social;

d) La autoconciencia y el pensamiento crítico e individualista resulta ser punzante y desolador, por lo que es preferible pertenecer y perderse en el grupo;

e) El señalamiento y eliminación social de las individualidades

f) Dignidad  y felicidad son implantadas mentalmente, por lo tanto, todos se consideran felices y dignos, independientemente de sus castas y sin importar su capacidad de abstracción.


2. El acondicionamiento social como forma de:

a) Eliminación, desconocimiento y en el mejor de los casos miedo a la libertad

b) Aceptar las decisiones sin cuestionarlas

c) Consumir, desear, pensar y actuar como ha sido establecido.

d) Eliminar el cuestionamiento individual y social


3. En palabras de Horkenheimer y Adorno, utilización de la razón instrumental para obtener los mayores beneficios técnicos y científicos que hagan más confortable la vida pero con una eliminación total de la razón final, atendiendo al desarrollo  de la capacidad de abstracción, de análisis y síntesis de sus miembros.

a) La eliminación absoluta de pensamiento filosófico

b) La eliminación de la educación crítica

c) Considerar la verdad como una amenaza y la ciencia como un peligro público


4. El uso paupérrimo del lenguaje que, en palabras de Wittgenstein, limita el mundo de los personajes y con ello se genera:

a) Incapacidad para abstraer ideas

b) Incapacidad de pensar

c) Incapacidad para expresarse


5. La falta de capacidad de los sujetos para arrostrar la realidad y su escape a través de determinados satisfactores como el soma


6. La cuestión de la felicidad resulta hedonista, pues:

a) Existen agradables vicios

b) Resulta innecesario soportar los males

c) No hay tentaciones que resistan


7. El tema de la muerte, como aceptación de un proceso natural.


Por lo que hace a la premisa Hegeliana radicalizada, podemos afirmar que la sociedad de Huxley  predica la unidad y la identidad como causas de la evolución y el desarrollo de la sociedad mientras que  la individualidad y la autoconciencia están prohibidas y son tachadas de elementos negativos que provocan inestabilidad social.

Todo gira alrededor del  espíritu o razón universal,  lo principal es el desarrollo social y por lo tanto ideas como las expuestas por Unamuno o Kierkegaard centrados en los individuos de carne y hueso que buscan y quieren su individualidad, son vistas como probables errores del sistema que podrían ocasionar un desajuste social, no por nada Bernard Marx y Helmoltz Watson son vigilados con cierta cautela al mostrar cierto grado de individualidad y pensamiento crítico.

No es que se defienda la postura individualista, hablemos de intrahistoria y vitoreemos la verdad de cada sujeto, por el contrario, consideramos que la phronesis de la naturaleza humana gira en torno a la concepción aristotélica que conjuga a la sociedad y al individuo  y que puede ser ejemplificada con el apotegma de Gasset: “yo soy yo y mis circunstancias y si no las salvo a ellas no me salvo yo”. Dicho en mejor expresión, Aristóteles afirmaba que la ciudad es anterior al individuo y el segundo no puede darse sin el primero, por lo que, evidentemente, entramos en una dicotomía necesaria donde los elementos sociales y el desarrollo del individuo se ven entrelazados, cuestión que en la obra de Huxley no se materializa.

El gran problema (o ventaja) de los individuos que Huxley describe, al igual que muchos de los individuos de nuestra sociedad, es que han sido acondicionados para evadir la soledad, buscar la felicidad en ciertos satisfactores que no corresponden a elecciones propias sino dirigidas. Ahora bien, en el supuesto de que sean autoconscientes y sean capaces de  atisbar directamente la luz del sol y abandonar  la caverna en la que habitan, descubren que la soledad y la independencia se presentan como un gran toro al que es mucho más fácil evadir que arrostrar con la valentía de  hacerse responsable de la propia vida.

Lo mejor para estos hombres, en palabras de Ingenieros, consiste en ser mediocres o pertenecer a la masa utilizando los términos de Gasset, lo viable es temer a la  libertad que se presenta como desconocida, punzante y desoladora  para perderse en el enjambre social donde es mucho más fácil aceptar las decisiones sin cuestionarlas, consumir, desear, pensar y actuar como ha sido establecido, cosificarse y amalgamarse para no estar solo.

Ahora bien, he de señalar que las ideas consumistas y la razón instrumental en la obra de Huxley resultan bastantes desoladoras cuando pueden aplicarse sin problema alguno a la sociedad del siglo XXI que ve en el consumo una finalidad y una forma de ser feliz. La evolución de la ciencia y la técnica generan múltiples satisfactores que facilitan la vida. Resulta evidente que el desarrollo de los mismos requiere un aparato científico y técnico para generar desarrollo. 

Lo cuestionable surge cuando, en palabras de Horkenheimer y Adorno, somos racionales en cuestiones instrumentales pero olvidamos el pensamiento crítico, capaz de abstraer y considerar al hombre como un telos. El problema se agudiza cuando cada individuo resulta ser tan especializado en sus labores que se encuentra incapacitado para realizar cualquier otra cosa y presentar por sí mismo un producto que requiera complejidad, abstracción y un conocimiento multidisciplinario.

En otro orden de ideas, es claro que Huxley conoce y crítica las limitaciones del lenguaje propias de una sociedad que privilegia la imagen  al evidenciar el proceso que surge en el salvaje después de haber leído a Shakespeare:

¿Qué significaban exactamente esas palabras? Sólo a medias lo sabía. Pero su fuerza mágica era muy grande, y continuaban rugiendo en su cabeza, y fue como si nunca le hubiese realmente odiado, pues nunca había podido decir cuánto le odiaba. Pero AHORA POSEÍA LAS PALABRAS, aquellas palabras como tambores, como canciones, como mantras. Las palabras, la historia de donde las tomo (no tenían ni pies ni cabeza, para él pero a pesar de todo era maravillosa, maravillosa), LE DABAN UN MOTIVO PARA ODIAR a Popé, Y HACÍAN MÁS REAL SU ODIO; HACÍAN HASTA AL PROPIO Popé MÁS REAL.
Luego entonces, las tesis propuestas por Wittgenstein en su Tractatus, referentes a que los límites de nuestro lenguaje son los límites de nuestra realidad, encuentran una metáfora bastante prudente en Huxley donde un aprendizaje basado solamente en imágenes resultaría limitado. 

Por otro lado, resulta irrisorio que todos los personajes se consideren felices cuando ni siquiera tienen la capacidad para saber lo que significa la felicidad y no gocen de la libertad para elegir el camino que desean recorrer. Siguiendo las posturas Socráticas y Aristotélicas sobre la felicidad que implican capacidad de abstracción, autoconciencia de la propia individualidad y conocimiento de aquello que nos resulta benéfico y satisface, pero sobre todo libertad, resulta claro que ninguno de los personajes puede considerarse verdaderamente feliz, a menos que su felicidad consista en una ignorancia plena de sí mismos y de sus circunstancias, lo que resultaría bastante deprimente. 


Pero no todo puede ser negativo en esta crítica filosófica a la sociedad que nos plantea Huxley, pues me parece bastante interesante el planteamiento y la manera de ver la muerte, como algo natural y propio de los seres humanos, pues a pesar de toda su ignorancia, esclavitud, falta de abstracción y de análisis de sus personajes, aceptan (por acondicionamiento) tal circunstancia y evitan cualquier idea de trascendencia.

Unamuno en Del sentimiento trágico la vida señala  que el hombre intenta por todos los medios evitar ese momento en el que se deja de ser, cuando morimos y todo deja de tener sentido y  se consideran tres posibilidades al respecto: 1) o sé que me muero del todo, y entonces la desesperación irremediable, o 2) sé que no muero del todo, y entonces resignación, o c) no puedo saber ni una ni otra cosa y entonces la resignación en la desesperación o ésta en aquélla, una resignación desesperada, o una desesperación resignada, y la lucha.

Por su parte Heidegger argumenta en Ser y tiempo que el advenir del hombre se convierte en verdaderamente auténtico cuando somos capaces de arrostrar esa calidad de seres caducos y disfrutamos al máximo nuestro ser pasajero en este mundo.  Resulta evidente que ninguna de estas posturas se encuentra presente en los personajes de Huxley, pero la idea implantada de ver la muerte como algo natural, no me parece tan descabellada.

2 comentarios

  1. A mi punto de vista “un mundo feliz”, considero que en realidad no es un mundo feliz, como debe de ser, porque la felicidad se busca no está establecida ni estandarizada ni mucho menos impuesta por alguien más, esto a mi punto de vista es una programación hecha por el hombre, lo que, principalmente, no es lo que en realidad lo hace feliz sino lo que otros quieren que lo haga feliz.

    ResponderEliminar
  2. Mi primera pregunta seria ¿es posible que se pueda vivir en un mundo donde todo esta preparado para que los hombres sean felices?
    Un mundo feliz donde nos plantea un lugar acondicionado para vivir en comunidad pero sin sufrimientos,sin reflexión y aun mas sin libertad para actuar.
    En verdad después de leer un mundo feliz podemos creer que lo es, se puede ser feliz sin familia,sin sentimientos sin una identidad propia.
    Es bueno darse cuenta que aunque estamos en este mundo que tiene defectos como todos los que en el habitamos puede y es un mundo feliz ya que en el no esta todo preparado y en el cada quien busca su propia felicidad, nadie nos dice lo que tenemos que hacer y cada uno tiene una familia,sentimientos y sobre todo una identidad propia.

    ResponderEliminar